El éxito del Proyecto de selecciones femeninas es innegable, y de ahí los grandes logros que nuestro voleibol femenino ha alcanzado, gracias a la dedicación y grandes inversiones hechas por su Presidente, el Licenciado Cristobal Marte.
El posicionamiento de nuestro voleibol femenino a nivel internacional ha sido sorprendente, sobre todo en un deporte en donde se requiere de la inversión de grandes recursos económicos, para poder competir y alcanzar un lugar entre la élite del mismo.
Para nosotros, no solo son las limitaciones económicas, lo que tenemos que enfrentar, sino que a esto, se ha incorporado la pérdida de talentos, debido al reclutamiento agrecibo que hacen los Community Colleges de los Estados Unidos. Los cuales usan a buscones dominicanos, para que recluten a jugadoras desarrolladas por el Proyecto de Voleibol Femenino, para que vayan a jugar a dichos colegios, en los Estados Unidos.
Esta nueva realidad, obliga al Proyecto a reinventarse, y crear nuevos mecanismos, para atraer una mayor cantidad de talentos, ya que resulta imposible que el mismo pueda desarrollar suficientes jugadoras de calidad, como para alimentar a las distintas selecciones del país, y a la vez, para alimentar el apetito de los colegios de los Estados Unidos.
Hay que buscar nuevas formas de hacer lo que hemos hecho hasta ahora, pues de no hacerlos, la viabilidad del Proyecto se va a ver seriamente afectada en el corto y largo plazo.
Los técnicos tienen que apurar el paso, pues las jugadoras que conforman nuestra selección adulta, no van a durar para siempre, y ya se aproxima el momento, en que un grupo de ellas, va a tener que dejar a la misma, y no vemos suficiente talento disponible, como para a mediado plazo, sustituir a las que van a salir, sin que se afecte el nivel de nuestra selección desde el punto de vista cualitativo.
A corto plazo todavia tenemos talento para sustituir a dos o tres jugadoras, pero eso es a corto plazo. Pues el talento joven existen, no nos da la tranquilidad de que a largo plazo contemos con un número suficiente de jugadoras, como para que podamos dormir con cierta tranquilidad.
Los técnicos tienen que apurar el plazo, y dejar la zona de confort que han tenído hasta ahora, y deben trabajar más fuerte, y con nuevos métodos, pues sobre ellos recae la responsabilidad de crear jugadoras para el Proyecto.
La producción de nuevos talentos se ha visto mermáda en los últimos tiempos, y eso hay que revertirlo de manera urgente.
No podemos seguir haciendo lo mismo, y esperar resultados diferentes.